La vida nueva, la transformación y propuesta de futuro por la que tantos han luchado, la presenta
Alí en varias imágenes poéticas. En ellas expresa la novedad vislumbrada en
esperanza, en medio de las lucha. Llama la atención el predominio de las
imágenes de la naturaleza para expresar los anhelos más vivos.
Se puede hacer mención de algunas imágenes humanas. En MUJER
DE VIETNAM aparece la imagen del nuevo nacimiento, del parto con dolor: “parió
con dolor / el futuro parió”. Y agrega en INOLVIDABLE HOCHIMIN: “el hombre que
sembró de esperanzas el vientre del Vietnam”. Esta imagen se repite en LA
PATRIA ES EL HOMBRE: “mi Patria está preñada, ¿quién le ayudará a parir? pa'
que se ponga bonita, que para la Patria muchacho”.
En LA GUERRA DEL PETRÓLEO niños, abrazos y sonrisas son futuro,
mas resalta la imagen personificada de los ríos Orinoco y Magdalena
abrazándose.
CANCIÓN MANSA PARA UN PUEBLO BRAVO es un desborde de naturaleza viva (viento, río, sol,
siembra, frutos, cantos de pájaros). Se escucha: “… la llegada del vendaval /
…el río … manso / …(que) se enfrenta al mar / vuelve a tu canto de turpial /
llena de gritos el cardonal / que hay semerucos allá en el cerro / y un canto hermoso
para cantar …/ y ya la gente empezó a sembrar / Sol colorado, viento del este /
se abren los brazos del gran durmiente”. Con esta riqueza de imágenes asociadas
señala Alí la novedad que llega, de ese modo apunta con claridad a la esperanza
y a la liberación en marcha.
En
TRIGO Y MOLINO el futuro es trigo que
germina e hijos unidos para lavar la
frente de la Patria. Se lava la frente de los enfermos para refrescarlos,
para darles aliento, así vislumbra el futuro Alí, restableciendo la dignidad de
la Patria, manifestando un gesto de cariño y humana compasión por ella.
En ME LO CONTÓ CANELÓN está la imagen
del samán de Güere, bajo cuya sombra
Bolívar juró la liberad de Venezuela. El futuro para Alí es de lucha, de
galope, pero buscando inspiración a la sombra
del Samán de Güere. La imagen final es ésta: “veo a Venezuela libre, veo a Venezuela nuestra”.
En
EL SOMBRERO AZUL se repiten de algún
modo las imágenes de germinar-florecer, y de lavar; el futuro es tiempo de que florezca la tierra, tiempo de que venga la alegría a lavar el
sufrimiento. Se agrega aquí la imagen original de empujar al sol para que se acerque la madrugada como expresión de
las luchas en esperanza. En ES DE NOCHE se anuncia que habrá mañana. La
imagen del sol, como liberación,
queda recreada en BASTA DE HIPOCRESÍA: “Sequemos el sudor de nuestra frente / y
busquemos tras las nubes al sol / busquemos con alborozo / el sol maravilloso
de la liberación”.
Es frecuente la imagen de la flor, a la que se agrega en CORO, el agua fresca: “hay flores y agua fresca en los
ventanales”. Es el alivio para la tristeza, es siempre posibilidad y futuro. En PARAGUANERA la flor es futuro alegre, flor cantarina, es regalo que se hace y que llena la mirada. Se
completa la imagen con las tunas encinta,
con los frutos a punto. El futuro es luminoso. La luna inmensa lo pregona.
El agua se repite en BORINQUEN, pero ahora es llovizna que refresca: “tu esperanza
está multiplicada en la llovizna latinoamericana que mojará los pueblos libres”.
En GUATEMALA ES CORAZÓN: “y correrán los ríos para lavar la sangre”. Y de nuevo
en AGUA CLARA NICARAGUA. Pero aquí se agrega una imagen bíblica inspirada en el
profeta Isaías: “las espadas se convertirán en arados, las lanzas se
transformarán en podaderas”. Aquí dice Alí: “tus fusiles, servirán / para
roturar los campos / para construir un gran barco / que navegue airoso en el
río San Juan”.
En la misma tónica, CUANDO NOMBRO LA POESÍA nombra la vida:
al hombre, a un río preñado de canoas, “al ave que nos trae un parabién… a un
vuelo triunfal de mariposas… a la piel florecida de mi tierra… y a la paz
sustentada en el arado… al camino donde duerme la esperanza y a la espiga
besada por un viento latinoamericano”.
En MI PUEBLO ME HACE CANTAR se repiten varias de esas
imágenes (humedad, flor y sombra) y se agrega la de los gallos que cantan a la luna, espléndida imagen que resalta la
dificultad presente (la noche) pero las luces que se descubren en la propia
tierra (la luna grande y bella) y la
voluntad de lucha del pueblo (gallos que despiertan antes de tiempo, en la
noche: “En mi pueblo la luna / es tan grande y es tan bella / que los gallos
despiertan / para cantarle a ella”).
Las imágenes de agua, flor y sombra tienen aquí sus
particularidades. El futuro es visto como frescura, de nube o marea; como perfume de
oreganal que llena le camino, y como sombra
de guayacán en medio del largo verano.
La imagen del viento se repite en TÍA JUANA: “…con el viento
del pueblo / tendré la furia de un vendaval”. La referencia al poemario de
Miguel Hernández Viento del pueblo es
casi explícita.
El sentido de estas
metáforas, y de su propio canto todo, lo desnuda Alí en Esconderse en la flor. Las imágenes evocan la vida que se tiene por delante. La flor no
está hecha para esconder la vida, sino para mostrarla e iluminarla: “Yo no
puedo esconderme en la flor”.
En Alí nos encontramos con
imágenes no precisamente para dormir
sino para continuar la lucha, con el
aliento que nos deja Alí y tantos otros compañeros y compañeras que inspiran
nuestro presente y futuro.